La previa a la gran noche del cine tuvo de todo en el Museo de la Academia. Estuvimos frente a estrellas como Brendan Fraser y Colin Farrell, escuchamos a directores como Guillermo del Toro y Edward Berger, y asistimos a la exhibición de varias de las películas que compitieron en las categorías con menos publicidad. Una experiencia que solo se puede vivir en LA, y que les contamos aquí.
La vida intermedia
En la semana de los premios Oscar tenemos el lujo de publicar al reconocido escritor mexicano Juan Villoro, quien analiza las distintas líneas de reflexión que se pueden vislumbrar en Bardo, la película de Alejandro González Iñárritu, nominada en la categoría Mejor Fotografía.
Cristóbal Briceño: “Mentiría si dijera que no disfruto la provocación”
En una extensa conversación con entrance, el cantante chileno reflexiona sobre su elogiado álbum “Doler crece”. Además, habla sobre la importancia del placer en la música, del papel que juega la fe por estos días y de las dificultades que ha enfrentado como figura pública: “Es mi deber combatir la tentación de martirizarme”.
Triangle of Sadness: El placer (y el horror) de la rebelión
La cinta de Ruben Östlund, nominada a Mejor Película en los Oscar y ganadora de la Palma de Oro, expone las miserias de la sociedad y se da el gusto de subvertir el orden social. Una mareadora sátira que da asco y risa por igual.
Mi manera de regresar a México era abrazar completamente mi cultura
Daniel Ximenez es el director creativo de Color a la Mexicana, un colectivo de 12 amigos y artistas basados en Los Ángeles, que han encontrado la forma de seguir atados a su tierra a través de la fotografía. Paisajes poco conocidos, sujetos ignorados, mujeres indígenas y cientos de costumbres e historias relacionadas a su herencia cultural son algunos de los temas que retratan.
Diálogos sobre cine: Babylon
El director de Whiplash (2014), La la land (2016) y First Man (2018), Damien Chazelle, vuelve a la pantalla grande con Babylon, un filme que vuelve a poner en primer plano la música –una de las pasiones del director– con la llegada del cine sonoro a Hollywood. Pero más que una historia, Babylon es un espectáculo: una película de un número de variedades, que coquetea con la muerte y el desborde desde sus inicios.
Klaus y Elf: nuestros favoritos para esta Navidad
La Navidad es para emocionarse, o al menos, en nuestras agitadas vidas de celulares, rutinas y encuentros planificados con semanas de anticipación, estas fiestas nos ofrecen la posibilidad de dejar pasar la magia; las barreras que nos previenen de enviar ese mensaje, de escribir esa carta o de hacer ese regalo, se desvanecen por un par de horas y es posible que surja la alegría, la espontaneidad y el amor. De eso se tratan también las películas de Navidad, querendonas, bonitas, con finales felices, en donde personajes apáticos, gruñones y distanciados de sus emociones son capaces de transformar sus destinos gracias a la magia que rodea esa festividad.
Así es también Klaus (2019), una película animada del español Sergio Pablos y su productora The Spa Studios, que trajo aire fresco a las películas navideñas. Esta es la historia de un mimado joven que por castigo de su padre asume la tarea de ser cartero, en una isla atrapada en el tiempo por el conflicto entre dos bandos. En ese periplo, nuestro protagonista conoce a Klaus, un leñador barbudo que encarna el mito del Viejo Pascuero, y con quien se embarca en una aventura que transforma su vida y la de los niños que viven en ese frío lugar. Una de las cosas más lindas de la película es el humor, sencillez y tozudez del cartero, y cómo comienza a abrir paso a la magia –simbolizada por el viento–, dejando de lado sus caprichos y construyendo un nuevo destino para sí mismo casi sin darse cuenta.
A través de su astucia, el mito de este leñador va creciendo y creciendo hasta convertirse en lo que es hoy. Pero el mito no tendría sentido si no estuviera basado en un genuino acto de bondad, una de las frases icónicas de la película.
Junto con Klaus –o gracias al cariño que siente por esta figura, que también tiene sus heridas– nuestro protagonista sucumbe a la alegría sin mas, al placer de ver a los otros reír, que es el sentido de cualquier noche mágica. Como dice Platón: “El amor no es realmente otra cosa que el deseo mismo de la inmortalidad”. Por eso estas historias resisten el paso del tiempo.
Elf (por Cris Mora)
Aunque no acostumbro a ver las mismas películas muchas veces, hay algunas excepciones: La La Land, Donnie Darko, El Rey León, V de Venganza y unas pocas más. Elf, o El duende (2003) también está en esa lista. La cinta, dirigida por Jon Favreau (Iron Man, Iron Man 2) y protagonizada por Will Ferrell, cuenta la historia de Buddy, un humano que por casualidad crece junto a los duendes que trabajan con el Viejo Pascuero y que, tras descubrir sus orígenes, va a Nueva York en busca de su verdadero padre, un gruñón y trabajólico editor de libros infantiles.
La premisa es simple y podría haber derivado en una comedia del montón, pero ocurre todo lo contrario, principalmente por la creíble ingenuidad con que Ferrell dota a Buddy: si creció con los duendes de Santa, cómo no va a querer ponerle syrup a todo lo que come, cómo no va a ser fanático de las luces de Navidad, y cómo no va a volverse loco por su viejo conocido, el mismísimo Viejo Pascuero.
Buddy es un niño en cuerpo de adulto, lo que implica capacidades como la honestidad absoluta, la curiosidad y la capacidad de pasar un buen rato con lo que sea que haya enfrente, desde la puerta giratoria de un edificio hasta un montón de papeles y unas tijeras. Eso, por supuesto, nos interpela como adultos: ¿por qué no somos tan honestos como él? ¿qué pasó con nuestra capacidad de asombro? ¿por qué necesitamos de tanto para disfrutar?
La felicidad inherente a Buddy es contagiosa. Funciona con su padre biológico, Walter Hobbs (James Caan), quien toma conciencia del poco tiempo que dedica a su familia, con Jovie (Zooey Deschanel), quien cambia la apatía de la vida diaria por ilusión, y con los neoyorquinos en general, cuyo renovado espíritu navideño saca de problemas a Santa. Una película encantadora, absurda, graciosa, crítica de los principios que rigen la sociedad y perfecta para entusiasmarse con las fiestas de fin de año. Y por si fuera poco, durante el filme Deschanel canta un par de clásicos de la época, como “Baby, It’s Cold Outside” y “Santa Claus is Coming to Town”, adelantando el exitoso nexo que tendría luego su banda, She & Him, y la música navideña (¡una buena alternativa para escuchar en Spotify por estos días!).
Crédito foto 1: The Spa Studios
Crédito foto 2: Warner Bros
The White Lotus: En el amor todo es empezar
El periodista y escritor Javier Rodríguez se puso la camiseta de Entrance, afiló sus colmillos y nos compartió un agudo análisis de la segunda temporada de The White Lotus: una de las mejores series de este año.
Diálogos sobre cine: Bardo
Fuimos al estreno de Bardo (2022), la nueva película del director mexicano Alejandro González Iñárritu y tomamos la difícil misión de describir y analizar un filme que funciona como rompecabezas de la vida de su protagonista y del país donde nació, México, con la lógica de un sueño.
Diálogos sobre cine: Tár
Fuimos a ver Tár (2022, Estados Unidos), el nuevo filme del director Todd Field, y nos sentamos a discutir sobre los aspectos más destacados de este “retrato de una mujer en una situación de poder con sus luces y sus sombras”. Hay spoilers, así que sugerimos ver la peli antes de leer.