Algo tiene Rubio que su creadora Fran Straube (36) no puede expresar de ninguna otra forma. Hace tres meses, la cantante y compositora chilena –que ha dado cauce a su creatividad a través de este nombre ficticio– decidió mudarse a Ciudad de México para dejar fluir su carrera musical. Se fue con su pareja, el hijo de ella, su perra y su gata. Cinco “seres vivos” en una nueva ciudad y el reto de salir de la comodidad. Algo que a Fran le cuesta, pero que Rubio le ha ayudado a soltar: “Ha sido mucho más amoroso que dificultoso”, dice desde su casa, con un tecito y sus cigarrillos a la mano. “Sentía que tenía hambre un poco del mundo, de expandirme. Tengo una imaginación de mi carrera musical que es muy yendo y viniendo, conociendo gente de otros planetas (risas), de otros países, por eso fue la decisión de atreverme”, cuenta.
En estos meses ya ha realizado varios conciertos por México. Este fin de semana se presentará en el Festival Out Loud en LA y también prepara el lanzamiento de su próximo disco Venus and Blue, cuyo primer single “Tu olor” fue lanzado este 31 de mayo con un videoclip. En esta entrevista Rubio nos comparte algunos detalles de lo que se viene y el inicio de esta nueva era.
Fran, primero: ¿las personas te dicen Rubio o Fran? ¿Dirías que son la misma persona?
“A la gente le llama la atención que cuando yo hablo del proyecto hablo en tercera persona, porque tiene un nombre ficticio, pero no puedo decir que yo soy Rubio (ríe). Prefiero que me digan Fran. Rubio es el proyecto y le puse así porque en el futuro o también en el presente siempre me gusta hacer varias cosas, entonces si le ponía mi nombre iba a casar mi identidad con este proyecto y te invento, quizás a los 60 quiero hacer una música ambient folclórica y le quiero poner otro nombre, porque al final Fran Straube tiene varios proyectos”.
Este año decidiste irte a vivir a Ciudad de México, ¿cómo ha sido ese cambio?
“Tenía que hacerlo, tenía que atreverme. Llevo tres meses, muy poquito. Me vine con mi pareja. Ella tiene un hijo, así que nos vinimos con él, mi perra y mi gata. Cinco seres vivos. Y ha sido bacán, mucho más amoroso que dificultoso. Siempre hay dificultades de vivir en un país nuevo, pero yo tenía ganas de salir de mi zona de confort. Con mi música siempre, por más under que sea, siempre he salido un montón a tocar afuera. En un momento fue como ya, necesito estar más céntrica también. Necesitaba que fuera más fluido todo. También siento que mi música es media intercontinental, que cuando he tocado fuera le gusta a la gente, hay como una nutrición en el mundo con mi arte. Por eso fue una de las decisiones de atreverme”.
En México también hay una comunidad de chilenos. Harta gente que se ha ido para allá.
“Sí, hay harta gente. No los he visto tanto igual. Yo soy media ermitaña. Ese también ha sido un tema porque irse a un país nuevo tienes que sociabilizar, pero soy super ermitaña. Me llevo bien conmigo misma, soy solitaria. En mi vida en general ha sido un tema la socialización, como obligarme un poco a salir de mi mundo. Pero la música es mi compañera súper potente. Con la música sociabilizo, es como mi caparazón, mi refugio, pero también expansivo porque con ella me puedo compartir como persona y también soy como… se me van muchas cosas que Fran no las tiene, como que con la música hay una cosa que me nace, muy adentro, no sé, es curioso”.
Son cosas de Rubio, digamos.
“De Rubio, de la música… Rubio es el proyecto que está hoy en día vigente. Pero sí, es como cuando antes tenía bandas en el colegio también me pasaba, o cuando tocaba con Miss Garrison también me pasaba, como que la música en sí me pasa algo que me libera de muchas cosas. Yo creo que por eso hago música porque hay una sensación que no me la hace nada que no sea la música, como esa liberación o no tener vergüenza o no sé. Hay como muchas cosas”.
Antes de convertirse en Rubio, y crear todo un lenguaje sonoro con sus discos Pez (2018) y Mango Negro (2020), Fran Straube no se imaginaba siendo cantante. “Como que yo era percusionista, baterista, pero nunca pensé que de un momento a otro iba a ser cantante”, cuenta. Luego de un camino espiritual con el ayahuasca que la llevó al descubrimiento de su voz y la creación de Pez, el canto se convirtió en su principal instrumento. “El canto ha sido como mi medio o canal catártico. Mi novia siempre me dice que yo debería ser Kramer, porque imito muchas voces y eso me gusta de Rubio. Hacer voces de la ultratumba, voces de ballena, después muy normales, después gritadas…Me gusta jugar con eso y me sale muy natural”.
Una vez dijiste que Pez fue la búsqueda de tu voz, que ese momento te imaginabas entrando a las profundidades para luego salir a la superficie. Luego, le pusiste al segundo Mango negro porque te imaginabas a ese pez anterior saliendo del agua para estar en el planeta Tierra ¿Cómo se viene este nuevo álbum en términos narrativos?
“Este disco juega mucho con la dualidad. Se llama “Venus and Blue” y hay canciones muy blue y canciones muy Venus. También siento que se ha demorado tanto en salir que ya me ha insegurizado. El otro día le decía al Pablo, ah, ya este disco está malo (se ríe). Como que te empiezas a atrapar porque yo siempre he sido de sacar los discos de una. Y este se ha tardado… las primeras canciones las hice el 2021, entonces, ya empieza como a entrarte mil cosas”.
¿Puedes contarnos un poquito de qué trata esta dualidad? ¿Es sobre el amor?
“Hay de todo. Hay una canción que me gusta mucho que se llama “Lo que no hablas”, que el coro dice ‘espero que mejores de lo que no hablas con nadie’. Entonces habla un poco de eso. Creo que mucha gente tiene cosas que no habla con nadie, quizás qué pasa dentro y por fuera hay otra cosa que se muestra. A eso me refiero con dualidades. O de repente hay canciones como de que no puedes olvidar algo y estás ahí…El primer single “Tu olor” es como muy agresiva musicalmente, rara, agresiva, pero es una letra de amor íntima. Entonces hay como esas dualidades. Canciones muy así agresivas y otras con ukelele y voz. Hay muy opuestos. Bueno, Rubio es súper ecléctico, juega harto con eso, pero ahora creo que hay canciones muy Venus, que son tranquilas, suavecitas y otras más blue, que son más dark, como muy extremista. Más encima Venus es v corta y Blue, b larga. También es lindo como la v corta y la b larga se juntan”.
¿Cuándo va a salir el disco completo?
“Esta semana apareció el primer single, ya después nos vamos a Estados Unidos. Luego tenemos un show súper importante acá en el Blackberry (CDMX), que es un lugar súper grande y después de eso ya parte la era Venus&Blue. Nos vamos a Seattle en julio a grabar una sesión en KEXP. Entonces, ya vienen puras canciones nuevas. Ya parte con todo el mundo del nuevo disco. En julio aparece otro single, en agosto el otro y ya septiembre, octubre, el disco completo.
La era Venus&Blue…
La era Venus and Blue, ahhhh.
Este fin de semana vas a estar en el Festival Out Loud en LA, que tiene a Grace Jones en su line up. ¿Te da nervio enfrentarte a nuevas audiencias?
“No, no me da nada de nervio, me encanta de hecho. Sobre todo ir a otros países a presentar mi arte, porque por más que sea en español siento que conecta súper bien incluso en lugares que no hablan castellano. El show de ahora es cortito, pero contenta, sobre todo porque el festival llamó a Rubio y porque el Line Up está entrete. Son bandas que me gustan, entonces digo vamos bien. Rubio está paso a paso orgánicamente dándose a conocer. Mi carrera ha sido muy paso a paso, del boca en boca. Nunca he invertido en marketing o cosas así. Recién ahora que entré a un sello, donde por primera vez va a ver plata para esas cosas. Pero siempre he sido muy independiente, del arte no más y aún así siento que Rubio se ha extendido un montón”.
Claro, de hecho aquí han puesto tu música en la radio pública KCRW.
“Qué buena, y eso se ha dado solo. Ha pasado no más, ni siquiera yo me entero. En Japón me han tocado, me escribe gente de Rusia de repente, o de Portugal y yo digo, cómo llega allá también. Se ha dado no más y eso es bonito. Más lento quizás, pero bonito”.
También creo que es porque usas mucho tu voz para crear sonidos, como si fuera otro idioma. ¿Cómo fue que llegaste a esa idea?
“Sí, yo también creo lo mismo. Mucha gente me dice que no se entienden las letras y todo eso, como que me lo critican pero también es el lenguaje de cada uno. Cuando canto invento un idioma y creo que algún día voy a hacer un disco con él, porque siempre después le pongo la letra. Cómo te digo… Yo estudié música y nunca me fue muy bien en la U. Nunca he sido tan virtuosa o tan metódica o tan teórica. Siento que el canto para mí ha sido mi medio o canal catártico. A mí me cambió mucho la voz cuando empecé a tomar ayahuasca. Hubo un gran cambio en mi canal vocal. A mí me encanta hacer voces y eso me gusta de Rubio. Hacer voces de la ultratumba, voces de ballena, después muy normales, después gritadas…Me gusta jugar con eso. Me sale también muy natural. Cuando muy chica me gustaba Korn y nunca voy a olvidar que el chico que cantaba en una parte hace como un idioma inventado. Lo encontré increíble, como ‘qué es esto’. Pienso que las influencias son cosas que te quedaron marcadas cuando chico. Cosas que me quedaron cuando recién las descubrí, como este tipo de Korn o cuando descubrí a la Bjork o Radiohead, o Thom Yorke, a Nirvana, Kurt Cobain. Siento que de ahí vienen mis influencias y que quedaron en el espíritu un poco de esos personajes”.
¿Esos sonidos que haces con la voz los vas guardando? ¿Después los puedes combinar?
“Claro, o sea, cuando uno de repente graba voces hace ideas y si te gustan quedan grabadas. Después ya las va replicando. A mí me encanta. La gente lo critica y todo, pero a mí me gustan mucho los efectos vocales porque siento que te da una libertad creativa o te lleva para otros lados también. De hecho, yo valoro mucho a la gente que canta a capela con su voz hermosa. A mí me da mucho pudor hacer eso. Algo me pasa con la voz desnuda, seca, siento como que quizás la escondo un poco. Analizando psicológicamente quizás lo escondo o no tengo idea. Pero cada vez menos. De hecho cada vez está más natural mi voz en las canciones”.
Hay una intención de desnudar esa voz.
“Claro, me gusta un poco salirme de la zona de confort. No sé po, ahora hicimos una canción y mi voz está muy seca adelante y fue como ya. Y me da pudor escucharlo, pero nada, soltando no más, también está bueno ir cambiando algunas ideas que uno tiene establecidas”.
¿Y este disco va a tener esos sonidos también?
Sí, juego mucho con los estilos. Hay cosas como ochenteras, hay cosas como muy folk, hay cosas como clásicas, música clásica como muy experimental, como que hay harta experimentación igual, hay más pop también. De todo, igual que todos los discos de Rubio.
Te iba preguntar que junto a la música, has ido creando una estética en torno a ti
Con los videoclips y las fotografías, ¿te gustaría seguir explorando eso?
Sí, bueno, ahora con este disco viene harto… bueno con Rubio siempre ha estado súper marcado el audiovisual, me gusta. Creo que también se puede expresar de otra manera la canción. Se genera un mundo imaginario que es súper bonito. Ahora el disco nuevo también va a traer un mundo imaginario que me tiene súper contenta. Ahora estoy trabajando con mucha gente de acá que se me ha acercado. Es muy lindo que la gente que llega a Rubio empatiza con el mundo estético, sonoro, espiritual, lo que sea, pero llegan y sienten la empatía. He conocido gente muy talentosa, muy bacán, en el mundo audiovisual y ahora vamos a empezar a trabajar todo esto con el material nuevo.Ahora estoy creando en ese sentido, más que en el plano musical que ya lo hice, ahora está todo el mundo visual que lo estamos haciendo.
¿Cuántos videos tienen pensado sacar? ¿Se puede adelantar cómo se viene eso? Bueno, ahora viene el primer single, que ya está el video listo. Después viene otro videoclip, que estoy haciendo con otro chico de acá. También estamos haciendo en paralelo como te hablaba de la dualidad de este disco, como que en muchos videoclips ahora no voy a aparecer yo. Quiero que este disco sea muy cinematográfico, como historias, como algo que decir también, no tan fashion ni tan estético, sino más realista, más cine. Y en paralelo va a estar como el mundo interno de Fran, paralelo a los videoclips. Estamos haciendo unos reels super creativos, de historias, como muy íntimo, muy sensible, muy cine arte también. Todo lo opuesto a lo que está pasando hoy en día con los videoclips, que es rápido. Esto va a ser como plano secuencia, luz natural… Ahora la próxima semana empiezo a grabar algunos. Después me voy a Veracruz a grabar otro videoclip, muy entretenido».
Por último, Fran, sacaste un disco en vivo hace poquito, “La explosión de los Pájaros” que contiene Pez y Mango Negro, ¿cómo fue esa experiencia?
Bien, bacán. Creo que era necesario, tenía que hacerlo, porque Rubio sobre todo en vivo es bien distinto al disco. Es mucho más explosivo. Se cambian harto las versiones, se alargan. También los chicos tocan conmigo hace tiempo entonces era necesario que ellos fueran parte de Rubio grabado, porque como te decía antes yo con Rubio soy muy yo y el Pablo, pero en el en vivo está el Nacho, esté el Andi, el Lego, y era importante que estuviera plasmada su esencia, su aporte al proyecto. Entonces espero que hayan muchos discos en vivo. Fue como una linda etapa de cierre.
