Con un ritmo pausado, el director vietnamita Tràn Anh Húng construye una historia de amor entre sus protagonistas alrededor de la cocina. Todo es sensualidad: “Algo muy pequeño y al mismo tiempo, (con) un significado muy, muy profundo sobre el sentimiento de la vida”.
El filme del director de “Pobres criaturas” presenta tres relatos que ahondan en las relaciones de dominación entre las personas. En un ejercicio similar al teatro, Lanthimos utiliza el mismo elenco cada vez, en diferentes personajes. Al final lo que vemos son una serie de actos de crueldad. Muchas veces sin sentido del humor ni contexto.
En la serie de Netflix, estrenada a fines de mayo, vemos una versión completamente deslenguada del actor. Hablador, elocuente, creativo y, sobre todo, al borde de la locura, su personaje Vincent se sumerge en un viaje de contradicciones y autodestrucción de la mano de Eric, un muñeco creado por su hijo Edgar que toma forma real cuando este desaparece.
La serie de FX y Disney tiene todos los atributos para ser considerada una de las mejores del año: suspenso, luchas de poder, un gobernante sabio y astuto, una mujer inteligente y misteriosa y un navegante extranjero que viene a alborotar las aguas del antiguo Japón. Todo esto, ambientado en un entorno natural y una producción absolutamente maravillosa, que intenta recrear cuidadosamente las formas, los gestos y los valores del imperio en el año 1600.
Netflix acaba de lanzar una de sus grandes apuestas para el año, Ripley, una serie de ocho capítulos basada en el mítico personaje de la escritora estadounidense Patricia Highsmith, protagonizada por Andrew Scott y dirigida por Steven Zaillan. Se trata de una adaptación más sombría, más novelesca y espectacularmente cinematográfica, pero que pone a prueba la paciencia de los espectadores con un Mr. Ripley demasiado indolente.
“Las mujeres ya no lloran” y “eternal sunshine” son los esperados discos de dos artistas que poco tienen en común, pero sí algunas cosas: pasaron por escandalosas rupturas amorosas y están de vuelta para demostrar su lugar en la música pop. Uno en español, el otro en inglés, otro con guitarras de rock, el otro con clásicos registros R & B. Ambos con muchas letras sobre el desamor, la tristeza, la rabia y el deseo de reinventarse a uno mismo. Ponle play.
El último filme de Wim Wenders nos invita a observar cómo sería la vida si decidiéramos prestar más atención a los momentos cotidianos y de ocio, en lugar de destinar toda nuestra energía a perseguir sueños y acumular logros y objetos. ¿Se puede tener una vida extraordinaria haciendo un trabajo tan ordinario?
Pablo Berger, director de Robot Dreams, la cinta animada de España que consiguió meterse en la pelea por los Oscars, tiene lo necesario para pararse frente a Hollywood: confianza y sentido del humor. En plena campaña por una estatuilla, el realizador contó cientos de detalles del filme: desde que querría hacer una secuela hasta que el cariño entre sus protagonistas podría ser algo más que una amistad.
Muchas veces los premios no logran reflejar la gran variedad de buenas películas que uno puede encontrar en un solo año. ¡Para eso están los Film Independent Spirit Awards, que se celebrarán este 25 de febrero y ofrecen una excelente guía de buenas películas que no han recibido la misma atención que otras, pero que no te puedes perder!
El último filme del director brasileño Kleber Mendonça Filho, que fue elegido por Brasil para representar al país en los Oscar, es un viaje íntimo hacia su ciudad natal y su pasión por el cine y los cines que solía visitar cuando joven. Utilizando la narración en primera persona, el director cuenta cómo han cambiado las cosas, así como sus pensamientos sobre el cine, el arte y la ciudad en general. Es esa soltura en la escritura, desde un punto de vista personal, el mayor acierto del filme, el que nos hace recordar que este es un artificio creativo.