El cine de Sean Baker, con elogiados filmes como The Florida Project (2017) y Tangerine (2015), nos tenía acostumbrados a la cercanía con la realidad, ingeniosos diálogos y la exposición de problemas de la sociedad estadounidense. Anora (2024), su cinta recién estrenada, sigue el mismo camino, aunque quita algunas gotas de realidad y agrega otras, varias, de humor y absurdo. A continuación les presentamos el diálogo que tuvimos sobre este filme, que nos encantó por su frescura, su ritmo, la química entre los personajes y su explosiva combinación de drama y comedia.
Cris: Finalmente fuimos a ver Anora, esta película que llegó precedida de muy buenos comentarios y siendo la ganadora del principal premio en el Festival de Cannes, la Palma de Oro, y ahí hay un tema, que es que en Cannes suelen ganar películas que llamaríamos indie. Por eso mismo, un triunfo de Anora no es que haya sido que estuviera cocinado ni mucho menos, pero no es un estilo de película que sorprenda que gane. Lo que sí sorprende es que la cola que dejó ese triunfo ha sido bien duradera. Ha logrado mantener la atención de la crítica hasta hoy, hasta su estreno en Estados Unidos y en otros países. Por ejemplo, se le ha mencionado como una de las favoritas a ser nominada a Mejor Película en los próximos Oscars, y ahí sí que sería una contendora poco tradicional.
Consu: Claro, porque Sean Baker se declara a sí mismo como un director independiente. Le gusta ese tipo de cine. De hecho, él dijo que ganar la Palma de Oro era haber llegado al clímax de su carrera. Él no está interesado en ganar el Oscar. Dice que por treinta años esto era lo que quería, celebrar el triunfo en Cannes con la gente de ese festival, pero sí tiene potencial, como tú dices, de participar al menos en la contienda de los Oscar, que atrae mucha atención, porque la historia es muy buena. ¿Nos puedes contar de qué trata?
Cris: Claro que sí. La película se trata de una chica, Anora, o Annie, como le gusta que le digan, que es interpretada por Mikey Madison (Scream 5 y 6), quien no tenía grandes papeles en el cine hasta el minuto, por lo que este es su rol consagrador.
Consu: Voy a hacer un asterisco aquí, porque Sean Baker hizo el cast, y le gustó mucho la actuación que tuvo ella en los últimos minutos de Había una vez en Hollywood, la película de Tarantino, para los que quieran buscarla. También le gustó mucho su actuación en las últimas Scream. Dice que después de ver esta última le dijo a su productor que la llamara.
Cris: Muy buen dato. Bueno, Anora es la protagonista y ella trabaja en un strip club, donde es bailarina y también escort. Puede bailar por dinero, de manera bien sensual, o puede tener sexo con ellos también, está permitido en el lugar donde trabaja. La cosa es que llega a este lugar un joven ruso muy adinerado, Ivan (Mark Eidelstein), muy adinerado, de quien pronto sabemos que es hijo de un magnate de ese país. Y ella, como es tan buena en lo que hace, y además sabe hablar ruso, la escogen a ella para que acompañe a este chico, y a partir de eso comienza toda una noche de juerga entre ellos dos, y de sexo, pero se termina estirando, porque al chico le queda gustando ella, y ella queda maravillada con su dinero, pero además, de a poco, con él. Las cosas eventualmente se comienzan a enredar cuando…
Consu: Cuando empiezan a tomarse demasiado en serio su relación, para no dar spoilers, y la familia de Ivan se opone, porque este chico, que es muy divertido, y que tiene mucha química con Annie, está solo en la casa que tiene su familia en Nueva York. Entonces él tiene pase libre para hacer lo que quiera y van estando cada vez más juntos, como si fuera una relación más seria, y en un momento esta información llega a su familia, que está en Rusia, y mandan a una serie de personajes, muy graciosos, que son la mayoría de Armenia.
Cris: Exactamente. Igual que sus personajes en la película. Está Toros (Karren Karagulian), que es como el líder de la banda.
Consu: De los que van a buscar al chico, ese sería su rol.
Cris: Cuidar que todo esté en orden con él y con la mansión familiar.
Consu: Bueno, junto a Toros están Garnick (Vache Tovmasyan), que también es muy gracioso, y hay otro personaje, que es Igor (Yuri Aleksándrovic), que va a tener un perfil un poco más serio y también interesante en el desenlace de la historia.
Cris: Esta banda es la encargada de terminar con la relación que se forma entre Ivan y Anora. Y en esa persecución la película se transforma en una comedia de alto vuelo. Realmente es una película que saca carcajadas, cosa que no abunda en el cine. Humor masivo, popular, la gente lo pasa muy bien. Y lo gracioso son las interacciones. Hay un tema con la mezcla de los idiomas, el inglés y el ruso. El encuentro de mundos también, entre Anora, que es trabajadora sexual y que está en la parte baja de la escala social –vive en un lugar bien humilde, por ejemplo–, e Ivan, en cambio, es un chico que podríamos describir como malcriado, en el sentido de que no está muy preocupado de cuánto dinero gasta, ni de ocupar su tiempo en alguna actividad productiva, pero además es muy divertido en su desorden. Él es una fuente de comedia en sí mismo, con sus actitudes inmaduras… La mezcla de estos mundos genera situaciones dramáticas y especialmente graciosas.
Consu: Sí. Hartas cosas que decir de la película. Primero, lo que creo que tiene como sello es que es súper dinámica. Desde el inicio siempre pasan muchas cosas, es una película muy ágil. En eso siempre me ha gustado mucho el cine de Sean Baker, el ritmo que tiene, que se siente medio suelto, ligero, con escenas que tienen harto espacio y a la vez está ocurriendo mucho. En un momento, cuando llega la banda a poner orden con Ivan, él se pierde y tienen que ir a buscarlo, y todo ese viaje que tienen que hacer para encontrarlo los hace entrar a lugares muy inusuales, pasan cosas inesperadas, eso es bien ágil. La otra cosa que tiene es que los personajes están muy bien hechos. Sus papeles los hacen muy bien, tienen mucha química entre ellos. La chica, uno al comienzo piensa que está interesada en él porque tiene una casa enorme, pero también se llevan bien genuinamente, y la cosa que tienen es que son muy jóvenes. Ella tiene 23 años y él tiene 21. Tiene algo de ingenuo la película, que está muy bien logrado en esos dos personajes. Obviamente no son personas muy maduras, porque tienen apenas 20 años. Y Anora sí está haciendo cosas de grandes, por el trabajo que tiene, pasa por experiencias que requieren poner límites, y él, por otro lado, todo lo contrario. Eso yo destacaría como los puntos fuertes de la película.
Cris: Estoy muy de acuerdo. Las actuaciones son buenísimas de todos los personajes. Porque la película funciona muy bien tanto en el tono de drama y en el de comedia, y a todos los actores les toca un poco de los dos géneros. Eso es parte de lo que funciona tan bien, que hay mucho absurdo, situaciones que se salen de lo normal, que se salen de control, ese tipo de cosas. Hay un viaje a Las Vegas, por ejemplo.
Consu: De hecho, tú me comentaste, cuando hablábamos del aspecto cómico de la película, que te recordó a otras películas más antiguas de Hollywood donde el caos en la fiesta, o la gente que se cae a la piscina, es parte del humor.
Cris: Claro. Hay cosas de Mi pobre angelito (Home Alone) incluso. El tema del chico travieso, aquí no tan chico, que se le escapa a los ladrones, y estos son medio torpes.
Consu: Aunque no creo que se haya inspirado en esa película Sean Baker.
Cris: No, por supuesto, pero digo para hacerse una idea de estos tipos que lo están persiguiendo, que son bien torpes.
Consu: Se nota que tratan de imponer una autoridad frente a Ivan, pero en realidad no tienen ninguna autoridad. Tienen miedo, en realidad, del jefe, de su padre. Eso también es gracioso.
Cris: Y además les pasa eso con Anora, que además es esta mujer empoderada que además es trabajadora sexual, y eso a ellos los complica un poco. No saben bien qué hacer con ella, no la quieren tocar, pero si es necesario sí, aunque no quieren que piense mal de ellos. Son unos rollos bien absurdos.
¡Sigue la conversación completa de estos diálogos en nuestro podcast! (desde el minuto 18’30)
Crédito de la imagen: NEON